miércoles, 28 de noviembre de 2012

El Poder de la Transformación
Por Serafín Contreras y Pastora Alva de Contreras
9:00am, 14 oct. 2012, CCI TGU
 
Romanos 12:1-2
“Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dio

s, que es vuestro culto racional. No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.”

En la Biblia encontramos que existe una tensión teológica entre el “ya” y el “todavía no” lo cual es necesario aclarar. Por ejemplo, se dice que cuando venimos a Cristo “ya” somos santos, pero “todavía no”, porque estamos en un proceso de santificación; “ya” nos hizo perfectos, pero “todavía no”, etc. Cuando llegamos a Cristo fue un evento pero que necesitamos continuar el proceso.
De acuerdo al texto de Romanos 12:1,2 existen cuatro palabras claves en este proceso: Presentar, Conformar, Transformar y Comprobar.

1. PRESENTAR. Debido al concepto griego de división en partes para conocer el todo, Pablo quiere que entendamos que es el todo que define quién somos, y comienza exponiendo que debemos presentar nuestro “cuerpo” como un sacrificio vivo, santo y agradable al Señor. Muchos buscan saber que hacer a través de otras personas porque no se “presentan” ante aquél que todo lo sabe, por tanto, de Él recibimos las respuestas, es vital saber escuchar la voz de Dios cada día. En Mateo 6:6 leemos: “Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.” Por tanto es vital pasar tiempos a solas con Dios para escuchar su voz y caminar de acuerdo a Su consejo.

2. CONFORMAR: El mundo propone un molde al cual la mayoría de las personas se someten y toman esa “forma” del mundo, y Satanás con sus engaños y mentiras ha introducido a muchísimas personas en ese molde que se contrapone a los principios bíblicos y los lleva a la perdición. Por ejemplo, las mujeres deberían preguntarse si están cayendo en las modas que el mundo les propone, sugiriéndoles que entre más “enseñan” su cuerpo mas andan a la moda, eso no significa que no debe arreglarse, claro que sí, pero deben hacerlo decorosamente.

3. TRANSFORMAR: Así como la oruga se transforma en una hermosa mariposa después de ese proceso doloroso de metamorfosis, también nosotros seremos transformados en algo hermoso si optamos por esta ruta, ya que también existe la ruta del dolor cuando NO me transformo y no le permito al Señor Jesucristo controle absolutamente mi vida, este proceso es recurrente y se extiende por años sin ningún cambio; y además, está el proceso del dolor cuando SI me transformo, que provoca un fuerte dolor y es un solo cuando le permito a Dios operar cambios radicales, pero es un solo dolor que corta con todo aquello que seguirá doliéndonos sino lo hacemos. Es como el dolor de muela que sufríamos de pequeños y nuestra madre nos ponían una pomadita para el dolor y tomábamos una pastilla y al amanecer se iba el dolor, pero después nuevamente venía ese dolor y estábamos en esa rutina continua de dolor, en cambio, cuando optamos por sacar esa muela, sabemos que nos dolerá mucho, pero será una sola vez y después vendrá la calma total.

La mente es el lugar donde Satanás lanza sus dardos y debemos cuidarla al máximo y llenarla con los pensamientos de Dios. Cuando en Proverbios 4:23 se nos dice “Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida.”, lo que nos está diciendo es que guardemos nuestra mente de todo aquello que pudiera dañarnos, por eso el Señor hablando por medio del profeta Isaías nos dice: “Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado.” Isaías 26:3

“FUISTES HECHO PARA EL CAMBIO”, estás diseñado para eso.
Hay dos elementos esenciales para la transformación
1. Síntomas dolorosos del estancamiento
2. Recompensas positivas al tomar pasos de fe.
Dios me hizo para el cambio, entones ¿Qué tengo que hacer?
Debo tener FE, y esa fe me llevará a tomar pasos de RIESGO, lo cual producirá el CAMBIO que espero, llevándome a tener ESPERANZA y con esperanza se aumentará mi FE y estaré en ese proceso continuo de transformación: FE-RIESGO-CAMBIO-ESPERANZA

4. COMPROBAR. Debemos entender que la voluntad de Dios no se prueba, sino mas bien se “Comprueba”, lo que se puede probar es el pasado y el presente y la voluntad de Dios me dice que tengo que hacer en una determinada situación, de allí la importancia de PRESENTARNOS ante el Señor, no CONFORMARNOS al mundo actual, y TRANSFORMARNOS en lo que el Señor quiere de nosotros para poder COMPROBAR cuál es la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario